Una compañía que funciona como si fuera el Airbnb para automóviles. Existe, pero no es como Uber, que funciona como un taxi sobre demanda. Me refiero a un marketplace en el que gente pone sus autos ociosos a disposición de quien quiera rentarlos por un tiempo determinado.
Se llama Turo y funciona desde el 2010. Como ya decía, se describe como una empresa de car sharing en vez de ride hailing, y permite que una comunidad de dueños de automóviles los pongan en renta y ganen dinero por ello.
Turo tiene una operación pequeña; poco más de 2 millones de dueños y viajeros y una “flotilla” de 161,000 vehículos. Según sus propias estimaciones, rentar un auto con Turo sale hasta un 40% más barato que hacerlo en otras empresas como Hertz o Avis.
Y aunque suene como una alternativa maravillosa para dueños de autos y posibles arrendadores que no tenemos un auto pero a veces necesitamos uno, Turo no es un buen negocio. Ha perdido dinero durante cada año que ha estado en operación –un acumulado de casi $544 millones de dólares (mdd).
Sin embargo, hace dos días comenzó su proceso para volverse una empresa pública. Turo buscará ofrecer el 5% de sus acciones exclusivamente a dueños y arrendadores, parecido a como Uber lo hizo con sus conductores cuando salió a bolsa en 2020. Es una manera de permitirle a su comunidad un voto de confianza para un modelo de negocio que suena prometedor, pero en realidad no gana mucho dinero… todavía.
¿Por qué no hemos escuchado tanto sobre Turo?
Se enfrenta a un mercado muy agresivo. Las empresas de rentas de coche han hecho mucha presión para ponerle el pie a Turo. Andre Haddad, CEO de la compañía, ha hablado sobre las diferencias fiscales que compañías como Enterprise quieren preservar ante competidores como él.
Problemas regulatorios. Además del problema de categorizar a una empresa tan disruptiva y aplicarle los impuestos correspondientes, imaginemos lo complejo que sería estandarizar pólizas de seguros o estándares de calidad de renta vehículos entre particulares.
¿Por qué habríamos de ponerle más atención?
Además de la tendencia millennial y centennial de no poseer automóviles, los retos que representa la escasez de microchips para la industria automotriz y la oferta de arrendamiento que están estrenando algunas empresas tradicionales, puede ser que al volverse pública, Turo pueda encontrar mayor fuente de financiamiento para llegar a otros países. Por el momento solo opera en EE.UU., el Reino Unido y algunas provincias en Canadá.
💊 Tecnología
Alexa, sé más útil. Un reporte interno de Amazon mostró que la mayoría de los usuarios estadounidenses de este asistente de voz solamente lo utilizan para escuchar música, poner el temporizador de cocina o encender las luces. Suena demasiado poco para una división que emplea a 10,000 personas y le cuesta $4,200 mdd a la compañía. También sería interesante ver cómo se han comportado los usuarios hispanoparlantes del dispositivo. Por ejemplo, Alexa llegó a México en 2018 y hasta ahora sus funcionalidades más novedosas incluyen la posibilidad de que la asistente te cuente un chiste de Pepito.
💊 Economía
Los neo bancos en México comienzan a salivar. Citi anunció que pondrá a la venta la banca comercial de Citibanamex; es decir, toda la operación de sus sucursales, créditos y Afores. La decisión responde a una estrategia corporativa del banco estadounidense por preservar solo sus líneas de negocio rentables, principalmente la banca institucional. Mientras que empresarios como Ricardo Salinas Pliego ya están considerando comprar a Banamex (aceptemos que siempre se llamó así), los neo bancos –sin sucursales físicas y que ofrecen una banca personal 100% digital– empezarán a disputarse a sus clientes de tarjetas de crédito y débito, que ascienden a más de 7 millones de personas. Nubank, la empresa brasileña que recién salió a bolsa, está bien equipada para entrarle al quite. Albo, Cuenca, e incluso Rappi son otros competidores.
💊 Redes sociales
¿La meta de Meta era un monopolio? Un juez federal en EE.UU. dio luz verde para que la Federal Trade Commission (FTC) continúe su investigación en la demanda contra Facebook, ahora llamada Meta, relacionada con supuestas prácticas monopólicas. Parecen minucias, pero estos avances son importantes: la FTC, que es la agencia regulatoria que ve por los consumidores, tiene un claro interés por fraccionar tanto a Meta como a Amazon. Que WhatsApp e Instagram fueran empresas independientes representaría un cambio radical para la empresa de redes sociales y los millones de usuarios que dependen de sus servicios. En otras palabras, podría significar un escenario en el que pagar por usar WhatsApp deje de ser una cadena de fake news.
Cada segundo miércoles estaré enviando este newsletter con temas relacionados con la tecnología que me interesan y considero merecedores de mayor conversación.
Veo difícil que un neobanco le entre a lo de Banamex. Apenas levanto 2.6b en el IPO. La compra estaría entre los 5 y 10 B, a menos de que se apalnque pero no creo valga la pena presionar tanto su balance. Es bueno el romanticismo de hablar de un neobanco comprando a viejo lobo de mar pero aún le falta océano por recorrer.